El pueblo pintado de azul, el primer pueblo pitufo en Juzcar, Málaga

Juzcar el pueblo pitufo, también conocido como el pueblo pintado de Azul, desde la provincia de Málaga, Andalucía, España.

El pueblo pintado de azul

Situado en plena serranía de Málaga es un lugar escondido entre las montañas al que se llega entre castaños en flor que forman un espectacular manto verde y amarillo en las laderas de las montañas y cierran el camino favoreciendo la sensación de que te adentras en lo más profundo del bosque hacia un pueblo pitufo.

Camino hacia el pueblo pitufo

Al llegar y tras aparcar el coche en unos aparcamientos en la entrada del pueblo, un arco anuncia el nombre del mismo y nos da la bienvenida e invita a hacer un recorrido a través de un parque, aunque primero nos acercamos al otro lado de la carretera a ver una curiosa fuente pintada de azul.

Entrada al pueblo de Júzcar

Caminando por el parque para visitar el pueblo vemos que este dispone de instalaciones de juegos para los más pequeños y todo el hace alusión a la temática de los Pitufos con sus diseños, colores e incluso estatuas de los personajes más populares como el pitufo filosofo.

Pitufo filósofo

Mas adelante el recorrido se abre y nos deja apreciar unas magníficas vistas de este curioso pueblo escondido entre las montañas que no solo parece pitufo por el color azul de sus casas sino también por el lugar en lo más profundo del bosque donde se encuentra.

Continuando el recorrido no paramos de ver detalles que hacen alusión a esta popular serie de dibujos animados como mas personajes enigmáticos como Papa Pitufo o Pitufina, y es que el arte u el desparpajo abundan por estas latitudes y los vecinos se lanzan a decorar los exteriores de sus casas.

Pitufina

Y es que los pitufos no acabaron en la Isla sino en Júzcar, aquel que se conoció como El Primer Pueblo Pitufo y cundo tubo que empezar a pagar derechos por la imagen de los pitufos pasó a llamarse El Pueblo Azul.

Júzcar

Pasear por Juzcar curioseando sus detalles, admirando el paisaje con su exuberante naturaleza y la magia de merecida leyenda de pueblo pitufo hacen que sea una experiencia placentera e inolvidable, sobre todo para los niños que disfrutan más con la imaginación que con los sentidos. Pasar el día y comer en uno de sus muchos lugares buenos y baratos es todo un lujo maravilloso.